sábado, 23 de agosto de 2014

6

A estas alturas de mi vida sólo quiero mirar por la ventana con el abrigo como colgado en mí. Quiero que por fin existan esas ganas de buscar una miss tristeza y darle el puntaje que se le pondría a la luna. Sólo se me antoja que esta noche explote y junto con ella el ukelele que suena a playa y junto yo con mis lentes más gruesos que antes. Porque simplemente mis pasos parpadean cual pez que peregrina, porque soy ser que dobla sus dedos y así sus venas, porque ya me jode que las chicas me miren como se mira a un cactus con lentes marrones. Los favores se me acabaron, ya no me los regalan, ni yo. Ahora es cuando las telenovelas parecen panfletos de amor y mi historia un panfleto de existencia resuelta en un cuadro sin pintar, en una canción con sed.  Debo de estar muy mal si en lugar de atar esta cuerda la dibujo niña e inocente y finalmente contar mi vida allá como si de una discusión se tratara.


No hay comentarios:

Publicar un comentario